Sistema Extrapiramidal

Sistema Extrapiramidal 

Realizado por: Jessenia Aponte C, Andrea Barrera L, Laura Luis S, Natalia Rojas P, Sergio Díaz A.

Es el sistema que regula la ejecución de los movimientos involuntarios (marcha, postura, tono muscular, nivel de alerta y conducta instintivas.) y a diferencias del sistema piramidal no se inicia en la corteza cerebral sino en diversas estructuras  situadas en el interior del cerebro.

Los componentes principales del sistema extrapiramidal son:

• Cuerpo estriado: recibe fibras de las áreas 4, 6, 9, 10 y 11 de la corteza, de los núcleos intralaminares, del tálamo y de la sustancia nigra. Conexiones eferentes: con globus pálido y sustancia nigra.
• Globus Pallidus: Centro de recepción y distribución de los impulsos de los núcleos basales. Recibe impulsos del putamen y del núcleo subtalámico. Sus fibras eferentes forman tres fascículos: el asa lenticularis, fascículo lenticular y fascículo subtalámico.
• Núcleo Subtalámico (Luys): Principales conexiones se establecen con el globus pallidus a través del fascículo subtalámico.
• Núcleo prerrubral: Está compuesto por neuronas pequeñas que se mezclan con las fibras del campo H de Forel.
• Sustancia Nigra: Conexiones aferentes provienen sobre todo de la corteza y del putamen y envía sus fibras al núcleo lenticular y al núcleo ventral anterior del tálamo.
• Núcleo Rojo: Recibe fibras de la corteza y del cerebelo y envía sus conexiones al tálamo, a la médula espinal a través del fascículo rubroespinal y a la formación reticular.

Función:

1.    Control de los movimientos voluntarios: El sistema extrapiramidal tiene una acción directa sobre el sistema voluntario por medio de las siguientes conexiones: el tálamo influye en la actividad funcional de la corteza, en las reticulares actúa sobre la actividad de las neuronas y de los núcleos del tallo cerebral y de la médula espinal.

Su intervención se relaciona con la adecuación del tono muscular necesario para movimientos determinados.

2.    Ejecución de los movimientos involuntarios: como lo son, balanceo de los brazos durante la marcha y parpadeo.

Movimientos patológicos: movimientos coreicos y atetósicos, los tics y los movimientos característicos del hemibalismo.

Síndromes Extrapiramidales:

Se pueden presentar varias lesiones en diferentes lugares del sistema extrapiramidal:

• ü  Lesión en el cuerpo estriado: Movimientos atetósicos (son contracciones involuntarias, lentas, de corta duración y poca intensidad; desaparecen durante el sueño, se presenta en manos, dedos y músculos de la masticación.) Movimientos coreicos (son más amplios y bruscos que los atetósicos, abarcan toda una extremidad, la cara o medio cuerpo; desaparecen durante el sueño.)
• Lesión en el núcleo subtalámico: Hemibalismo (movimientos amplios, violentos y continuos, compromete partes proximales de las extremidades y tuercen o doblan el tronco.
• Lesiones núcleos extrapiramidales, globus pallidus y sustancia nigra: Son caracterizadas por el Parkinsonismo: Temblor (temblor en reposo, de ritmo regular de 4 a 8 oscilaciones por segundo. Se exacerba con las emociones y desaparece con el sueño.) Tono muscular (lesión de los núcleos basales, en el hombre aumenta el tono muscular.)
• Enfermedad de Wilson o degeneración hepatolenticular: Rara condición que se asocia a la degeneración del núcleo lenticular con la cirrosis hepática consecuencia de un trastorno del metabolismo del cobre.
• Corea de Sydenham: Lesión en el putamen y núcleo caudado, frecuentemente aparece en niños y movimientos coreicos asociados a un cuadro infeccioso.
• Corea de Huntington: es de carácter hereditario, autosómica dominante, aparece en edad adulta y manifiesta movimientos coreicos y atetósicos acompañados de deterioro mental progresivo.   

Bibliografia:

• Bustamante B, Jairo. Neuroanatomía funcional, Editorial Fondo Educativo Interamericano S.A. USA. 1978.